Anatoly Scherbin
Ficción / Mistero y detectives
112 páginas
 
[RESEÑA]
 
Anatoly Scherbin nace en una familia de clase trabajadora, con la que comparte desde la temprana infancia una insaciable sed de conocimiento; una necesidad ineludible de explorar y comprender el mundo a su alrededor. La literatura se convierte para él en una herramienta fundamental para alcanzar aquello que sus circunstancias le impiden. Alumno predilecto, estudiante destacado; fue un prodigio frustrado, una promesa que quedó solo en eso. La necesidad de sobrevivir él y su familia frustran sus esperanzas de terminar los estudios superiores. Una existencia caótica, cargada de experiencias desafiantes, va nutriendo su idiosincrasia, que en la temprana madurez comienza a volcarse en lo literario. Escribe para corregir más que para retratar lo que ve de tosco y dañino en el mundo que lo rodea. Da a sus personajes las características que hubiera deseado encontrar en sus semejantes, y los lleva por caminos algo más felices que el de su propia existencia. Es idealista sin ser irreal. Su escritura es un garrapateo a los pies de los monumentos de sus predecesores: Ian Fleming, Edgar Rice Burroughs, Georges Simenon, Mika Waltari. Junto a ellos pretende que se lea, por el tiempo que dure la huella de su mano: "Yo estuve aquí".