MUSIQUILLA
La impronta sigilosa del viento
va meneando sus caderas al tiempo
cuestionando el nihil novumsobsole,
a la intemperie de los recuerdos.
Memoriosa y añosa la soledad
rencorosa con atuendos de nostalgia
visita la fragancia mitificadora
de las evocaciones pormenorizadas e iluminadas
siguiendo la tendencia del siglo de los “No-s”
Miss Sunrise desfila por la pasarela de las máscaras,
el simulacro se vuelve perfecto
con cada contorneo de su minifalda;
mientras tanto “Anteojitos” que se había acostado utópica
despierta de sopetón ante la megalópolis monstruosa,
lo pesadillesco se le vuelve tangible,
ya no hay cabida a rosas sueños ni dulzones príncipes.
Coquetona Miss Sunrise con Míster Falomoney, rey de la barra,
simulan un acto sexual bajo las centellantes y colorinches estrellas ahumadas,
extasiados ante la sorda musiquilla fastuosa e indeleble
del motor que resuena en la noche borracha.
Escrito por:
Jessy-Chamorro-Salas