AGONÍA
Tantas veces a tu lado,
a las puertas de la perpetuidad
con tu mirada cansada no me hallaste.
Sombría tarde
oscura noche
silenciosa espera
último suspiro.
Cadencia entre el final y el comienzo,
ojos ya sin ganas de llorar,
labios pálidos ausente su voz.
Mirada estrecha con el paladar reseco,
luego,
silencio eterno.
Escrito por:
Alfredo-Gaete-Briseño