¿Cómo se edita un libro?

Al plantearte la publicación de tu libro, pueden surgir muchas dudas. En un texto anterior, te hablamos sobre la importancia de la edición profesional antes de publicar, pero ¿qué incluye este proceso?

La edición es un proceso diferente para cada texto, pues corresponde a las mejoras que requiere la obra para encontrar un equilibrio entre lo que se desea decir y la forma de hacerlo. Además, es importante que el autor quede satisfecho con el resultado, pero también que el libro sea atractivo e interesante para los futuros lectores.

Considerando esto, el proceso de edición implica:

Vigilar que exista coherencia y cohesión en el desarrollo del texto.
Verificar que la construcción de los personajes sea verosímil.
Detectar que no existan lagunas o errores de fondo en el desarrollo de la trama.
Comprobar y corregir nombres de lugares, datos, fechas y eventos históricos, así como también verificar la veracidad con la que son utilizados en el texto.
Comprobar que los diálogos estén expresados en un lenguaje natural y adecuado para cada personaje.
Corregir inconsistencias en la sintaxis del texto, como uso de los tiempos verbales, concordancias de género y número, pleonasmos, régimen preposicional, entre otros.
Comprobar que el narrador seleccionado sea coherente con la manera en que cuenta los hechos.
Establecer un equilibrio entre el tiempo de la historia, el tiempo del relato y el tiempo referencial.
Verificar la coherencia en la descripción del mundo literario creado por el autor.
Comprobar que el desenlace del texto se corresponda con el ritmo de la historia y la resolución del conflicto.
Verificar que exista consistencia en la división de partes o capítulos del libro.
Asesorar al autor en el desarrollo de aspectos como la verosimilitud de un personaje, los conflictos sin resolver, el vocabulario utilizado, etc.
Comprobar que el desarrollo del texto y el lenguaje utilizado sean coherentes con el público objetivo (por ejemplo, son diferentes entre una novela para adultos y un relato infantil).
Asegurarse de que no exista plagio.
En el caso de los textos técnicos, corroborar la información de las referencias incluidas y completar los datos.
Verificar el empleo de los recursos literarios y permutarlos o pulirlos cuando se requiera.
Realizar una corrección ortográfica para detectar palabras mal escritas y tildes faltantes o sobrantes, además de adecuar a las normas y necesidades del texto el uso de los signos de puntuación.
Permutar o suprimir palabras repetidas, redundancias y cacofonías.
Adecuar a las normas ortográficas la aparición de expresiones que incluyan cantidades, fechas, magnitudes, etc.
Corregir el uso de negritas, cursivas y mayúsculas.

Estos son algunos de los aspectos que se tienen en cuenta durante la edición de un libro. ¿Te resulta abrumador? Por eso es conveniente contratar a profesionales que se encarguen de estas tareas, solo así será posible limpiar la obra de fallas y presentarla de manera atractiva. Además, el equipo de edición te asesora con respecto a la reseña y biografía, derechos de autor, maquetación, distribución y promoción de tu libro.